lunes, 23 de diciembre de 2013

La delgada línea entre las bromas y el bullying


Establecer la diferencia entre una broma y acoso, he aquí un aspecto clave para mejorar las relaciones entre los pares. Encontramos en el periódico La Tarde de la ciudad de Pereira este interesante artículo...

Ver página de donde fue tomado el texto

Imagen tomada de http://bitacoraacosoescolarbullying.blogspot.com/p/caso-silvia-acoso-escolar-e.html


La delgada línea entre las bromas y el bullying 
Una primera diferencia, y la que debería darte la clave para saber si estás bromeando o haciendo bullying, es la intención con la que se hizo el comentario: ¿querías lastimar o solo tomar del pelo? De todas maneras algunos comentarios es mejor no hacerlos. 

Existe una delgada línea entre las bromas y el bullying. Sin embargo, ten en cuenta que si te vas a burlar del físico de alguien o de su forma de ser, lo más apropiado sería que no lo hicieras. No hay forma de que ese tipo de comentarios salgan bien, ni siquiera si estás solo con tu amigo o amiga. Este tipo de comentarios solo lastiman. Si la forma de ser de tu amigo te está lastimando de algún modo, entonces ni siquiera vale la pena bromear, lo mejor es decirlo tal como es.  
Sin embargo, es verdad que algunas veces bromeamos con nuestros amigos de cierta manera que puede parecernos apropiada y que de alguna manera puede asemejarse a un tipo de bullying y acoso, pero ¿cómo saberlo?  

Las similitudes 
Las burlas y el bullying generalmente implican burlarse de alguien, ridiculizarlo de una manera que nos parece divertida, pero en el caso de las bromas la idea no es que la persona se vea tonta, sino reírnos con ella de algo gracioso, como un simple tropezón, por ejemplo, algo que a todos nos puede pasar. A diferencia del bullying, la intención es reírse un rato y no volver a tocar el tema. Si sigues repitiendo lo que pasó una y otra vez para que los demás se rían de la persona en cuestión, entonces estás haciendo bullying y eso no está bien. 
“No nos reímos cuando Jason se burla de Ashley”, es el lema de una excelente campaña en Estados Unidos contra el bullying. Una forma de detener a quienes lo hacen: no hacer gracia de sus comentarios pesados. 

Las diferencias  
Las burlas generalmente implican que la “víctima” de la broma también se ría del asunto y que su dignidad no sea herida. Las burlas nunca involucran la religión, raza, apariencia u otras características importantes de una persona.  
Intimidar a una persona definitivamente no es una broma. La intimidación siempre es algo denigrante y peligroso para la otra persona, así que ni en broma amenaces a nadie… a  menos que la amenaza sea que le harás cosquillas. De lo contrario, ten mucho cuidado porque hasta podrías enfrentar cargos penales. 

Preguntas y respuestas 
El bullying 
no es una broma 
¿Cuál es la diferencia entre hacer bullying y hacer una broma? 
“Si está lastimando los sentimientos de la otra persona o dañando su autoestima, entonces es bullying. Es por eso que hay que aclararles esto a los chicos y chicas para que no haya lugar a confusión”.  
¿Por qué los chicos y chicas están haciendo bullying? 
“Por la misma razón que lo han hecho siempre, porque son diferentes. Lo importante es entender que no son solo las cosas que haces, también son las que dejas de hacer: dejar que uno de tus compañeros o compañeras coma solo en la cafetería, o ignorándolo (a) como si fuera invisible. La idea es simplemente no hacer lo que no quieres que te hagan, no hacer nada que sea cruel o doloroso para alguien más.  
¿Los adultos qué ejemplo están dando? 
“Es es otro problema, los adultos también hacen bullying, pero son sofisticados. Hacen cosas como dudar de los talentos de una persona sin prueba alguna para demostrarlo, hablar a sus espaldas, llamarle raro o rara creyendo que es divertido, haciendo a un lado a esa persona o recargándolo de trabajo. Tristemente, ese es el ejemplo que están dando los adultos a sus adolescentes y los adolescentes a los niños más pequeños”. 
*Creer que las chicas son débiles también es una forma de bullying, así como hacer creer que los hombres no deben llorar. Criticar los sentimientos nobles de los demás no es una broma.  
*Criticar la raza de una persona jamás debe ser tomado como un chiste. Esto es bullying y no se debe aceptar.  
*Los chistes hacen referencia a las situaciones y no a la personalidad de alguien. 
*Una forma de poner un granito de arena es no riendo con las malas bromas o el bullying que otros hacen a los más débiles. No te dejes llevar por la corriente.


LISTA 
El momento de detenerse, Lilian Mora, psicóloga  

1. Debes dejar de hacer la broma que tan graciosa te parece, cuando notas que la persona a quien se le juega la broma no se siente bien con ella. 

2 Las bromas se hacen una sola vez, ten eso muy claro. Más de una vez ya no es divertido.  

3 Burlarte de si un amigo tuyo se trajo un zapato de un color y otro de otro color puede ser divertido, pero si las bromas implican que tu amigo está pasando por un mal momento económico, físico o emocional, ya no es divertido y solo te verás como un tonto tratando de hacer sentir mal a alguien.  

4 Cuando tú mismo te sientes mal de haber hecho el comentario que hiciste o esa broma física que podría parecerte divertida, entonces definitivamente dejó de ser una broma.  

5 Si te sientes bien haciendo sentir mal a otra persona es momento de parar: no significa que seas necesariamente una mala persona, pero puede que algo esté pasando dentro de ti. Busca a un adulto de confianza y habla del tema. Querer hacer sentir mal a  otra persona no es buen comportamiento.

Y ahora un poco de humor...


Imagen tomada de http://www.irreverendos.com/?p=1800

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